REUNIÓN CLUB PRIVADO EL ARISTÓCRATA: EL LINO

Principalmente enfundados en lino, se reunían un soleado día de mayo los miembros del Club Privado El Aristócrata para hablar acerca del mencionado tejido.  Para ello, vinieron al Hotel Intercontinental de[...]

Principalmente enfundados en lino, se reunían un soleado día de mayo los miembros del Club Privado El Aristócrata para hablar acerca del mencionado tejido.  Para ello, vinieron al Hotel Intercontinental de Madrid tres invitados de sobra conocidos en el mundo de la moda masculina:
Elia Caliendo de Satoria Caliendo y Luca Avitabile de Satriano Cinque vinieron de Nápoles para este fin, y ya en Madrid se reunieron con el tercer invitado, Simon Crompton, autor de Permanent Style y colaborador en revistas como The Rake o How to Spend It, con quién tuvimos ocasión de tratar en una anterior reunión del club.

Durante el día José María López-Galiacho, autor de este Blog, acudió con los poenentes a que conocieran de primera mano los establecimientos con más solera y reputación de la capital para que a su vuelta Elia, Luca y Simon pudieran hacerse eco de la forma de trabajar la sastrería y la camisería en nuestro país.

Durante la reunión se trataron diversos temas, siempre manteniendo como tema central el lino, desde su evolución en la sastrería, hasta la forma de trabajarlo pasando por sus diversas aplicaciones y propiedades. Se habló también, inevitablemente, acerca de las diferencias que tienen la sastrería y camisería napolitanas con la española e inglesa, y qué es mito y qué realidad.

Elia dio comienzo a la ponencia con una clase magistral de historia de la sastrería explicando la evolución en el peso del tejido de lino y como afecta ese a su utilización. Explicó que, antiguamente, era un tejido mucho más pesado y grueso, que permitía su utilización desde la primavera hasta el otoño, mientras que hoy en día se asocia con la ligereza y un clima completamente estival, lo cual hace que se vea mucho menos.  

Comentó Simon, a propósito de la evolución en el uso del mismo, como en Londres aún se pueden ver caballeros portando trajes de lino en verano, al igual que utilizan tweed para ir al campo, y el contraste que esto supone con gran parte de la Europa mediterránea, en la que el lino, y la chaqueta en general, está desapareciendo y sin embargo, teniendo en cuenta el clima del sur de Europa se antojan más apropiados que otros tejidos para los meses más calurosos.

A pesar de la mencionada evolución del tejido hacia la ligereza, y su más que conocida propensión a la arruga, comentaba el sastre que no es un tejido más difícil de trabajar que otros, y únicamente hay que tener en cuenta los defectos que naturalmente posee a la hora de cortar, y que tiene propensión a estirarse, por lo que hay que tener en cuenta la deformación producida por su elasticidad con los movimientos del portador de la prenda.  Luca, sin embargo, tenía otras consideraciones hacia el lino, principalmente en lo que se refiere a las camisas de vestir. Para que el lino
pueda ser lo suficientemente ligero y delgado como para poder utilizarse para hacer camisas que puedan portarse con un traje, ha de ser transparente, y el llevar transparencias no es algo por lo que se caractericen los caballeros interesados en la clase de moda aquí tratada.

Sumamente interesante resultó la pregunta qué se le hizo a Elia: qué es mito, y que es realidad acerca de la sastrería napolitana. Siempre desde la más absoluta humildad y dejando claro que ese era únicamente su punto de vista, explicó que él no sabía que eran muchas cosas típicamente napolitanas como la “spalla napoletana” de la que tanto se habla ya que no entra entre la terminología que habitualmente utilizan los sastres en Nápoles. Si expuso, sin embargo,  la diferencia de filosofía que hay entre ciertas escuelas de sastrería, principalmente la británica,  y la actitud napolitana.

Considera que el hacer los hombros anchos, la cintura estrecha, y cualquier clase de estructura con el fin de mejorar la figura podría deberse a que hay tipos de sastrería a los que acude un cliente que quiere sentirse mejor consigo mismo y verse más agraciado de lo que es, mientras que en la sastrería napolitana, si a uno le gusta su cuerpo mucho mejor, ya que  lo que va a tener será una chaqueta que se ajuste al mismo, sea como sea este. Lo mismo dijo acerca del lino: si a uno le gustan las arrugas, estupendo, de lo contrario, deberá buscar otro tejido.

Aún hablando de la clase de trabajo que se realiza en Nápoles, Luca hizo especial hincapié acerca de la gran cantidad de trabajo a mano que se hace en la camisería napolitana, mientras que en otros lugares del mundo se ha ido pasando paulatinamente a las máquinas y demás nuevas tecnologías, en Nápoles jamás ha llegado a perderse del todo y ello hace que se enorgullezcan sus camiseros de la gran cantidad de puntadas a mano que llevan sus camisas. Esto llevó a algunos de los artesanos presentes en la sala a destacar que en nuestro país aun es posible encontrar semejante cantidad de trabajo a mano pero esto no es sabido internacionalmente, al contrario de lo que ocurre con Nápoles. Naturalmente, esto solo podía derivar en la siempre presente cuestión acerca de la capacidad de Italia para vender su industria de la moda.

Las intervenciones de los italianos aportaron información de primera mano acerca de cómo se vive eso dentro de Italia, y fue sin duda interesante saber que muchas marcas italianas ni siquiera tienen presencia en dicho lugar o están orientadas de forma prácticamente exclusiva al mercado exterior, con especial mención para las marcas que adoptan nombres italianos sin tener absolutamente nada que ver con dicho país con el fin de imbuirse de ese prestigio que da lo italiano. Fue entonces cuando hubo sitio para mencionar grandes nombres de la moda italiana
diseñada para el público general, y explicar cómo han cambiado las reglas los italianos en el diseño de la moda para ponerse al frente de la industria. Se puso como ejemplo la existencia de grandes escuelas de diseño de moda, pero ninguna de sastrería, lo que significa que esta ha podido conservar su esencia más tradicional.

Tras tratar muy diversas cuestiones primeramente sobre el lino, y posteriormente acerca de la industria de la moda italiana en general, su filosofía y el por qué de su inmenso éxito,  pudimos disfrutar de un refrigerio durante el cual los miembros del club tuvimos la ocasión de dejar de lado la formalidad que imprime la mesa presidencial  y charlar de forma relajada con los ponentes y los demás miembros entre un buen vino y el jamón cortado por un maestro cortador.

Javier Valencia

Arqueólogo

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COMENTARIOS

4 comentarios

  1. Hola,

    Una reunión inmejorable, en la mejor compañía posible, con casi todos los miembros del club y los invitados. Si que es verdad que la nueva presidencia a traído pros y contras. Me gustaría señalar el principal pro: La cena-coloquio post conferencia. Hasta Elia Caliendo salio de la sala pidiendo, por favor, un vino Español.
    Esas dos horas de cena y conversación en corrillos no tiene precio.Jamón y conversación…….. así hasta cansarse. Un saludo a todos los mienbros,largas vida a EA y al Club.

    Por cierto la nueva presidencia no tiene contras,era una broma . L.R. estoy a sus pies.
    S. D. Y BESPOKE.

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  2. Thanks Luca,

    We really enjoyed your speech. Thanks for sharing with us your deep knowledge about bespoke shirt-making. We hope to see you soon.

    Best,

    EA

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