Uno de los sastres que más me ha sorprendido de un tiempo atrás, y para bien, ha sido César Calvo de Mora. Y lo ha hecho por varios motivos.
El primero por su cercanía, el segundo por su pericia, de casta le viene al galgo el ser rabilargo. Y por último, por sumarse a ese grupo de sastres jóvenes que garantizan que los más jóvenes vayan a poder seguir disfrutando del placer del vestir.
Me contaba en casa la semana pasada que, si bien sus comienzos como sastre independiente no fueron fáciles, hoy ya apenas coge encargos de otros sastres. Su elevado número de pedidos, algo que me alegra por deberse en parte a dar a conocer su trabajo en esta página, le permite dedicarse casi en exclusiva a sus clientes. Indudablemente, su buen hacer, el boca a boca y un precio francamente competitivo han sido factores, igualmente, determinantes.
Con el armario de verano con más trajes de los que los tiempos actuales permiten disfrutar, es momento de explotar la versatilidad del dos piezas. Reconozco que me cuesta hacerme al traje sin corbata. Por más que lo vea ya casi institucionalizado me sigue pareciendo tan horroroso como el primer día cuando alguien le quitó la corbata.
Sin embargo, los dos piezas, esos conjuntos donde chaqueta y pantalón no coinciden en color ni, probablemente, en tejido sí son ideales para vestirse tanto con corbata como sin ella. Y si tenemos en cuenta que el calor relaja los códigos de vestimenta, relaja que no elimina, el dos piezas se convierte en el conjunto a vestir en las ocasiones no muy formales.
Sirva este artículo como mera introducción para el posterior desarrollo del nuevo encargo que hace unos días empezó a tomar forma en el taller de César. Aunque en próximos capítulos veremos el desarrollo del conjunto, adelantar la idea a la que intentaremos dar vida.
Creo que no hay color más veraniego que el blanco, el color que mejor trata el calor y, que de escogerlo en lino o algodón, el resultado siempre resulta acertado. Cierto que no es un color para todo el mundo. O lo sería si fuéramos más atrevidos, pero claramente si algo no somos los españoles es atrevidos.
De la misma forma, el lino tiene sus detractores. Su facilidad para arrugarse no convence a todos por igual, ¡y eso que ahí radica su belleza!. Con el pantalón blanco decidido, tocaba escoger el color y la composición de la chaqueta. Como hemos apuntado alguna vez en esta página, tan importante es que el color del pantalón y la chaqueta se hablen como que lo hagan sus tejidos.
Si el compuesto del tejido del pantalón es 60% lino y 40% algodón – 320 gramos de peso -, mezcla imbatible en verano por su arruga, caída y frescura, la chaqueta de 250 gramos cuenta con un 15% de seda, un 14% de lino y un 71% de lana virgen. De ambos tejidos hablaremos extensamente en el siguiente artículo.
La elección del color de la chaqueta sí me llevó, reconozco, cierto tiempo. Si en invierno el azul marino combina prácticamente con todo, en verano difícil es encontrar un color que no lo haga con el blanco. Quizás por eso se complicó algo la elección.
En un principio pensé para la chaqueta el tejido rosa que aparece en la segunda foto. Sin embargo, me parecía una combinación muy previsible. De ahí, que finalmente me decidiera por el verde oscuro. Ambos tejidos, pantalón y chaqueta, de los italianos de Caccioppoli.
Sé que el tema de colores es muy particular, pero de haber sido vosotros, ¿qué color de los que salen en la foto hubierais escogido para combinar con el pantalón blanco?
Continuará…
El Aristócrata
16 comentarios
Mgnifica combinacion, habria escogido los mismos colores, lo que me da un poco de pensar es si el pantalon al ser blanco transparentará un poco. Por otro lado, siempre me ha parecido interesante el trabajo de Cesar, orientativamente en que rangos de precios estariamos hablando?
Un saludo!
Creo que se dice el precio en algún artículo de Cesar pasado. Me suena que unos 1.500€ o incluso menos. Una auténtica ganga; más teniendo en cuenta las telas que utiliza y el resultado de su trabajo.
Pues entonces me temo que Cesar además de ser sastre es contrabandista. Imposible tener semejante bar en tu propia casa cobrando 1.500€ por traje si no tienes algún negocio turbio detrás
Estimado Albert,
El bar y la casa es de EA. Y debería de ser más generoso con el tamaño de las cervezas que ofrece. 😜
Buenos días,
Me gustan las 2 opciones y no creo que el rosa sea obvio, no se ve tanto. Yo hubiera escogido un naranja terroso o un marrón claro.
Sobre el traje sin corbata, creo que hay pocas cosas más horteras, el dos piezas me parece perfecto no llevarla o llevarla. Y si el traje es de raya diplomática, como la que lleva el amigo César, ya ni te cuento.
Deseando ver como avanza el proyecto.
Feliz semana a todos.
Eneko
Yo tb me hubiera decantado por la chaqueta verde. Cualquiera de las otras tb las veo muy acordes. Dicho lo cual, no creo que se equivocara con ninguna de ellas pues claramente es un conjunto muy elegante y que hoy no se ve. Lo de Cesar es una pena. No entiendo como alguien que vende elegancia va con esas pintas. Me recuerda a Jaime Gallo. Impensable ver un sastre con traje y sin corbata en cualquier sastrería de prestigio inglesa o italiana. Esto no quita que los dos conjuntos de César que han salido en esta página me parecieran muy elegantes y de una medidla impecable.
Deseando ver como evoluciona la prenda. Enhorabuena por la elección.
El traje sin corbata es horroroso. No hay más que hablar sobre este tema. Parece uno El Lute recién detenido o un tipo que viene a la oficina después de haber estado de farra toda la noche. Como bien dice Jose Mª, la alternativa del dos piezas es lo ideal. La elección de color la veo perfecta. Quizás por las ganas que tengo de un tiempo a esta parte por una buena americana de lino en color verde oscuro o verde botella.
P.D: Como buena noticia, señalar la definitiva muerte del ‘sincorbatismo’ este año en la Feria de Sevilla. Si bien en la ciudad siempre ha habido buen gusto al vestir para las ocasiones importantes y la corbata está entre las características destacables, es cierto que durante el embate terrible que desde algunos círculos políticos y periodísticos se hizo hace algunos años contra el uso de la corbata, llegué a ver algunos conjuntos desprovistos de ella en la Feria. En la mayor parte de los casos en personas de escaso gusto. Pero el caso es que ahí estaban. El año pasado y este año, sin embargo, me ha llamado la atención -para bien- el ver a casi la totalidad de jóvenes llevando traje con corbata o dos piezas con corbata. Prácticamente eran testimoniales las personas sin corbata -jóvenes o mayores- con las que me crucé esta Feria.
Buenas tardes , a la pregunta de qué tela escoger yo hubiera preferido la de espiguilla verde ,pero lo que no distingo si es una tela gorda para un verano que no sea en el norte .
Pero en cualquier caso me parece muy elegante
Lo que sí me parece un privilegio , es que se acerque el sastre a casa a tomarme medidas .
Felicidades !
Buenas tardes suelo bajar a Madrid 1 ó 2 veces a la semana y visito al cliente ya que mi taller lo tengo algo lejos de la capital , me parece un servicio bastante exclusivo.
Y bueno el próximo día bajaré con corbata jejeje.
Estimado César,
Buen encajador. Como se suele decir. ‘ up to you’.
Me quedo con tu trabajo y no con tu estilo personal. Aunque sea muy curioso.
Será un verdadero placer recibirle en mi casa con o sin corbata !😀
El verde es una excelente elección y polivalente, ya que permite incorporar al guardarropa urbano un color más asociado a actividades deportivas, -caza, golf…-. Cómo pueden ver en los medios S.M.Don Felipe vistió con chaqueta verde oscuro y pantalón gris recientemente en el Open de Tenis de Madrid.
Espectacular combinación de telas. Será interesante ver el estilo de la chaqueta y del pantalón.
Respecto de la corbata, tanto para dos piezas como para traje completo, habrá que seguir insistiendo en llevarla. Por experiencia propia, en algunos ambientes laborales parece que renace (sobre todo entre los más jóvenes). Quizá sea una batalla perdida, pero no hay color…
Muchas gracias por el artículo.
Un saludo a todos.
Totalmente de acuerdo con J. En mi centro de trabajo, entre los jóvenes que han entrado recientemente, en su mayoría reivindican y usan la corbata. No sé si tras el fin de la pandemia hay una generación de jóvenes deseosos de vestir bien, tras años en pijama.
Excelente artículo, es muy grato ver que las nuevas generaciones siguen conservando el legado del buen vestir; sin duda el traje ha vuelto y promete quedarse por mucho tiempo más.
Coincido que si bien el clima caluroso relaja los códigos de vestimenta no los elimina y es por eso que se opta por no llevar corbata o ir por telas más ligeras como la lana Merino y el lino.
En mi próxima visitar a Madrid ansió visitarlos.
Saludos desde México
Antonello
Probablemente mi elección habría sido la misma salvo, quizás, algo en camel… Con respecto al traje sin corbata, el tema es similar al de traje con mocasines…pues depende…del traje ( y siempre de quién se lo pone). No es lo mismo un traje de invierno, formal, oscuro, en cuyo caso tanto los mocasines como la ausencia de corbata estarían proscritos, que un traje veraniego, informal, de algodón o lino con chaqueta desestructurada y bolsillos de plastrón que, a mi juicio, se puede llevar sin corbata y con unos driver’s estupendamente. Y en este caso es importante el cuello de la camisa, que debe quedar en su sitio para no acabar parecido a Tony Montana.
Saludos