BESPOKE IX: LA SASTRERÍA NAPOLITANA

A lo largo de los años habéis sido muchos los que de manera abierta o a través de peticiones privadas reclamabais que se escribiera un artículo sobre la sastrería italiana y más [...]

A lo largo de los años habéis sido muchos los que de manera abierta o a través de peticiones privadas reclamabais que se escribiera un artículo sobre la sastrería italiana y más concretamente sobre la sastrería Napolitana.

Antes de entrar en profundidad a hablar de este tipo de sastrería es importante tener en cuenta que la sastrería Napolitana ya no es exclusiva de los sastres Napolitanos y que hoy al ser este estilo muy demandado sastres de otras ciudades, e incluso de otros países, practican también la técnica utilizada por los sastres napolitanos.

Por ello, aunque todos podamos tener en mente una serie de diferencias básicas entre, por ejemplo, el estilo inglés e italiano es importante recordar que no siempre ciertas características son exclusivas de uno u otro corte. Es más, lo que hoy mucha gente denomina de forma genérica corte italiano no siempre coincide con el tipo de corte de ciudades como Milán o Roma.

Igualmente, es importante no olvidar que en Nápoles e incluso en Roma hay tantos estilos como sastres existen y generalizar como hoy se hace sobre el corte napolitano, milanés o romano es dejar de lado muchas consideraciones.

Y para terminar estas notas introductorias también hay que tener en cuenta que el trabajo del sastre evoluciona en el tiempo y que una chaqueta cosida hace quince años por, por ejemplo, Rubicciani diferirá bastante de la última chaqueta que abandonó su sastrería.

La sastrería alemana y francesa

Dicho todo esto, también es importante recordar a los más fervientes seguidores de la sastrería napolitana que al igual que en todos los países hay caballeros que cuidan con gran esmero su vestimenta también hay buenos sastres en prácticamente la totalidad de los países de la vieja Europa.

Y quien no esté de acuerdo con esta afirmación le recomiendo que profundice en los requisitos y los años de experiencia que se exigen en Alemania para poder poner en la puerta de una sastrería las palabras Maestro Sastre.

Mención aparte requiere Francia. No deja de ser curioso observar como en Francia, país que todavía ocupa la cúspide de la alta costura femenina, cada día resulta más difícil encontrar caballeros que vistan elegantemente de traje. Y eso que no hay que olvidar que en Paris en un tiempo atrás se establecieron muchos de los sastres y camiseros ingleses e italianos más reputados.

Los mismos Henry Poole, Caraceni y Cifonelli y Hilditch & Key, abrieron todos en Paris aunque hoy excepto la casa italiana Cifonelli y el inigualable también italiano Camps De Luca ya nadie queda en Paris y los italianos, y la mayoría también de los ingleses, que fueron un día a Francia volvieron a su país sencillamente porque los caballeros franceses no demandaban ya sus servicios.

Y todo ello sin olvidar que en Francia los caballeros llegaron a vestir francamente bien como atestigua la elegancia de actores de la talla Noiret, Belmondo o Gabin.

Dicho todo esto, es de justicia admitir que hoy son el Reino Unido e Italia los dos países referentes a la hora de vestir.

El denominado British Style tiene toda una historia detrás mientras que el denominado Stile Italiano es algo reciente. Con total confianza podemos afirmar que Nápoles sin Savile Row no hubiera alcanzado las cotas de calidad y perfección con las que hoy cuentan sus principales sastrerías.

Como ya dijimos en aquel artículo donde comparábamos el British Style con el Stile Italiano es de justicia admitir que si hoy hay una forma de vestir que traspasa fronteras esa es la italiana. Sin embargo, tampoco nadie debería dejar de admitir que si el estilo italiano y concretamente la sastrería napolitana ha alcanzado tales niveles de perfección es porque tenía donde fijarse y a partir de ahí crear ese estilo tan particular.

El por qué de Nápoles y Londres

Puede parecer lógico que la mayoría de los hombres mejor vestidos del Reino Unido se concentren en Londres. El poder económico de la capital inglesa así como el aglutinar muchos bancos tanto nacionales como extranjeros, despachos de abogados, sedes de multinacionales, auditoras, consultoras y otros lugares donde se cuida con especial esmero la forma de vestir ha hecho que desde hace dos siglos los más reputadas sastrerías y camiserías abrieran allí sus puertas.

Sin embargo, algo que llama poderosamente la atención es el hecho de que independientemente de que ciudades como Milán o Turín hayan sido el centro financiero de Italia, sea precisamente una ciudad de poco más de un millón de habitantes la que mejor haya sabido guardar la tradición. Nápoles es hoy el referente del buen vestir y la Meca a la que acuden los caballeros más elegantes del mundo en busca de ese corte tan característico.

Quizás el principal motivo de todo esto sea el hecho de que en Nápoles la tradición tenga, en todos los aspectos de su sociedad, mucha importancia. Solo como ejemplo apuntar que la gran mayoría de los caballeros napolitanos no entendería acudir a cenar a uno de esos lugares fashion que tanto abundan en las ciudades europeas y prefieran acudir a las Trattorias de toda la vida.

No deja de ser igualmente curioso el que en Nápoles la camisería a medida esté más extendida que en cualquier otro sitio en el mundo y sus propios habitantes elijan acudir a la camisería a medida y no al RTW a la hora de comprar sus camisas. La camisería a medida está tan extendida en Nápoles que sus precios son francamente competitivos de compararse con los de las principales ciudades europeas.

Es tal el poder de la tradición en Nápoles que es de los pocos sitios de Europa donde los caballeros todavía siguen yendo a las barberías y no a las peluquerías tal y como se conocen aquí.

De la misma forma, a nadie le debería sorprender encontrar señores de 70 años que solo tengan en su armario trajes a medida. Y esto no es porque sean presumidos; es sencillamente porque así han sido siempre las cosas allí y para sus habitantes resulta inconcebible que fuera de otra forma.

El comienzo de la sastrería Napolitana

Durante los años dorados del vestir masculino, los años 30, la elegancia de Cary Grant (quien por cierto era también cliente de la sastrería romana Caraceni), de Fred Astaire o de David Niven se apodera de la gran pantalla y su manera de vestir es imitada, o al menos se intenta, por los caballeros de la época.

Y es precisamente a partir de los años 30 donde el conocido hoy como estilo napolitano empieza a florecer.

Es concretamente con la unión de los míticos sastres Attolini y Rubinacci cuando nace en los años 30 la archiconocida London House. Es concretamente la London House y otro sastre italiano hoy ya elevado a mito por los estudiosos de la aguja, Angelo Blasi, quienes empiezan a desestructurar las armadas chaquetas inglesas imprimiendo ese toque único que desde hace unos diez años atrás ha ganando la partida a los sastres de la Row.

Para los amantes de este corte y reforzando la idea con la que abríamos este artículo de que no es bueno generalizar al hablar del corte napolitano apuntar que todavía hoy se dice que en Nápoles existen dos escuelas: la de Blasi y la de Attolini.

La principal diferencia es que el corte de Blasi es algo más estrecho de hombros y su chaqueta algo más armada, más tipo inglesa, mientras que la hechura de Attolini es algo más ancha. Los seguidores de Attolini mantienen que fue él quien desestructuró la chaqueta de Blasi, le quitó las hombreras y empezó a coserla entretelas muy finas dando lugar a lo que hoy la gente evoca cuando piensa en un traje napolitano.

Aunque el párrafo anterior podría hacer “correr chorros de sangre” entre los fervientes seguidores de una y otra corriente, lo que parece claro es que la sastrería italiana encontró en la alta sastrería inglesa el perfecto espejo en el que fijarse, imprimirle su propio estilo y crear un traje de una enorme comodidad.

Comodidad que consiguen olvidándose del forro, prescindiendo o utilizando finísimos paddings y escogiendo solo telas de tacto exquisito así como de una enorme ligereza y elasticidad.

Quien haya tenido la oportunidad de vestir uno de estos trajes habrá sentido la sensación de ir vestido de sport y no con traje alguno. El que apenas pesen los trajes resultantes y la facilidad de movimientos que permiten sus telas hacen que se adapte de forma totalmente natural al cuerpo. Esto hace que transmitan la sensación de ir, permitirme la expresión, como si se fuera con ropa de deporte. Y si lo que buscamos es esto hay que reconocer que como los Napolitanos ninguno.

De Londres a NápolesSi bien es de justicia admitir que desde hace ya diez años es la sastrería italiana y más concretamente la napolitana la que domina el mundo de la alta sastrería también lo es el hecho de que Nápoles no sería lo que hoy es sin, por un lado, un buen marketing y por otro Savile Row.

Así por ejemplo, resulta apropiado recordar que el mismísimo Rubinacci envió a SR a un miembro de su familia para que aprendiera el trabajo de los sastres londinenses y lo exportara a la London House de Nápoles.

También el sastre de Roma, Tommy Caraceni, fue enviado por su padre en los años 30 a Henry Poole para que entendiese y aprendiese la forma de trabajar de la que por aquel entonces era considerada una de las mejores sastrerías del mundo.

Otro ejemplo fue Arturo Cifonelli quien aprendió la profesión de su padre Giuseppe en Roma pero en vez de quedarse en Roma también se marchó a SR. En 1911 decidió volver a Italia y en 1930 terminó abriendo su tienda en París; donde hoy todavía sigue esta sastrería.

Si de los años 30 a los años 60, SR es el centro mundial de la más alta sastrería después de esta fecha se empiezan a invertir las tornas y la más actual y natural sastrería italiana gana año tras año más popularidad y los ojos de los consumidores de este arte que es la sastrería a medida empiezan a fijarse en ella.

Sus principales características

Los italianos han adaptado el estilo clásico inglés a los nuevos tiempos estilizándolo y desestructurándolo lo que ha dado lugar a lo que hoy se conoce popularmente como el estilo Napolitano.

Este característico corte se diferencia por contar con apenas “relleno” o entretelas, no tener forro excepto en la las mangas y carecer de estructura. Si bien todas estas características se pueden encontrar en otras ciudades italianas con elevadas temperaturas seguramente sea el archi conocido hombro napolitano la nota más característica del estilo napolitano.

Tampoco podemos olvidar esos tejidos de enorme ligereza y comodidad que nadie como sus sastres saben elegir para combatir las elevadas temperaturas de Nápoles. ¡Y eso que la gran mayoría de ellas todavía proceden del Reino Unido!

Son precisamente estas características las que hacen tan atractivos y hasta objeto de culto los trajes que cortan las tijeras de los más aventajados sastres napolitanos. Sin embargo, antes de dar por bueno la idea generalizada de que la terminación de estos trajes es la más avanzada y la más exquisita es importante hacer alguna puntualización.

El cliente de la sastrería más purista napolitana debe saber que estos trajes dan la sensación de estar más próximos a un conjunto de sport que a uno de chaqueta. El aspecto ligero del traje napolitano le quita formalidad y no deberíamos sorprendernos de escuchar de alguna voz autorizada que esto no es un traje y que además su construcción tiene mucho más de mito que de realidad.

También es importante recordar que si la tela no es de una calidad excepcional y confeccionada pensando precisamente en que no será cosida con forro alguno es muy probable que termine arrugándose de forma rápida. Y por supuesto si no se acude a la cuna de esta sastrería es mejor asegurarse un buen corte de “la vieja escuela europea” que innovar este corte con uno de nuestros sastres.

Este tipo de confección consigue resultados espectaculares con los trajes cruzados. Las DBJ tan demandadas y bien vestidas en el país de la pasta envuelven con una gran naturalidad y estilo a sus afortunados propietarios.

Como acabamos de apuntar uno de los rasgos más característicos del estilo Napolitano es la forma en la que se cosen las mangas a los hombros. Apenas se forma el conocido popularmente como “chorizo” y tampoco se aprecia apenas la costura donde se unen el hombro y la manga.

La terminación de la hombrera es redondeada. Igualmente, en muchos casos se aprecian pliegues a la altura de la costura del hombro. Esto último es así debido a que la chaqueta no cuenta con apenas hombrera y en la caída natural de la tela no queda más remedio que aparezcan éstas; algo que hoy hasta se exagera para reclamar el sello de “hombro napolitano”.

A esto hay que unir que para ganar comodidad la extensión de la tela del brazo que se une con la hombrera es más larga que la del diámetro de la hombrera. Esto obliga al sastre a, con mucha pericia y siempre a mano ya que las máquinas de coser no permiten coser dos trozos de tela de diferente extensión, introducir el sobrante de la manga en el hombro. Es precisamente esto lo que hace que aparezcan en muchos casos esos pliegues de los que estamos hablando.

Con todo esto se consigue una caída del hombro totalmente natural donde apenas se aprecia la existencia de la hombrera; entre otras cosas porque ya de por sí la propia hombrera es mucho más delgada de la que estamos aquí acostumbrados.

Otra de sus características principales es que, guardando las diferencias, se asemeja en gran medida al corte del hombro de una camisa; lo que los sastres napolitanos denominan como spalla camicia.Es importante nuevamente mencionar que si bien ciertas características, como la ausencia de padding en la hombrera, son comunes a la mayoría de los sastres napolitanos, otras como la mayor o menor limpieza de líneas dependerá de cada casa.

El no contar con forro les obliga a coser los bolsillos sobre la chaqueta en forma de parche, es decir, sobre la tela de la chaqueta y no con un bolsillo interior. Por eso es hoy tan frecuente observar como los sastres napolitanos han preferido dejar el interior de la chaqueta limpio, sin que se aprecie forro ninguno, y coser los bolsillos por fuera.

Otras casas, también napolitanas, prefieren forrar solo los costados para poder coser tanto los bolsillos laterales como el del pecho en el interior de la chaqueta.

¿Qué sastrería es mejor la italiana o la inglesa?

Sinceramente creo que quien mantenga una postura radical hacia una u otra sastrería se equivoca. Y se equivoca porque no hay una sola sastrería italiana o inglesa como tampoco hay un solo sastre en cada una de estas y porque también el trabajo de los sastres evoluciona.

Además de todo esto, no podemos olvidar que un buen sastre está capacitado para hacer el corte que le pida su cliente. Y quien no esté de acuerdo con nosotros que se pase por Anderson & Sheppard y pida que le corten un Rubinacci. Seguro que se sorprendería con el resultado.

Igualmente, a cada uno de nosotros nos puede gustar más uno u otro estilo y no por ello el otro corte es demasiado anticuado o por el contrario demasiado moderno. Si a todos nos gustara lo mismo creo, por ejemplo, que este blog no existiría.

Para mí nuevamente la clave está en el cliente. Dependerá de él y de lo exigente que sea el que consiga un traje mejor terminado. Todos nos esmeramos más en nuestras profesiones cuando sabemos que a quien tenemos enfrente conoce la diferencia entre lo bueno y lo excepcional.

Del Duque de Windsor, Fred Astaire, Cary Grant e incluso del mismísimo Príncipe Carlos han comentado sus sastres que eran clientes difíciles y que no se conformaban con cualquier cosa buscando siempre la perfección en la terminación de sus trajes.

Decía Angelo Blasi: “personalmente no me interesa el cliente a quien se puede satisfacer fácilmente, ese que está inmediatamente contento con mi trabajo. Hay poca satisfacción con un cliente así. Por el contrario dame el cliente exigente. En una palabra alguien que sea igual de perfeccionista que yo y que me obligue a sacar todo mi talento y destreza”.

Dicho esto y después de estudiar la sastrerñia napolitana creo que para calificarla de mejor o peor que la de otras ciudades es de vital importancia conocer nuestro concepto de traje y finalmente de lo que significa la palabra elegancia para nosotros.

Conclusión: Para todos esos lectores que me acusan de “no mojarme” con mi opinión en mis artículos decirles que sin quererme extender mucho yo diría que si lo que buscamos es limpieza de líneas, sobriedad, simplicidad, perfección, ausencia de arrugas y un traje que obedezca a los patrones clásicos de lo que debería ser un traje nuestra decisión debería ser la sastrería europea (inglesa, española, alemana o francesa).

Si por el contrario lo que buscamos es comodidad, estilo, la máxima calidad de mano de obra, naturalidad, diseño, tejidos de calidad excepcional y súper ligeros así como desprender un cierto grado de desenfadamiento parece claro que nuestra opción debería ser la sastrería napolitana.

O dicho de otra forma: la alta sastrería inglesa sigue siendo propietaria de la hechura más perfecta y de la atención al mínimo detalle mientras que la napolitana es única en diseño y en calidad de la mano de obra.

Y después de todo esto, lo más importante: ¿vosotros qué opináis?

Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo


El Aristócrata

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COMENTARIOS

54 comentarios

  1. Es un placer seguir, casi desde el principio, sus artículos. No se hasta qué punto he conseguido vestir correctamente, pero está claro que estoy en deuda de gratitud con Vd.
    Reciba un afectuoso saludo.

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  2. Es un placer seguir, casi desde el principio, sus artículos. No se hasta qué punto he conseguido vestir correctamente (ya me gustaría conocer su opinión), pero está claro que estoy en deuda de gratitud con Vd.
    Reciba un afectuoso saludo.

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  3. Si hablamos de trajes, me quedo con el estilo inglés.

    Sin embargo para chaquetas sport últimamente he pasado de mis habitualmente pesadas y ásperas chaquetas de tweed a encargar otras más desarmadas, de tejidos más ligeros y bolsillos de parche. ¿El resultado?. No está nada mal. Además me parece que este estilo (seguramente a caballo entre el inglés y el italiano) le resta seriedad a ciertos dibujos como una pata de gallo (ahora mismo espero una preciosa de Sears & Roebuck) o un donegal, lo que alguien jóven como yo agradece.

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  4. Felicidades nuevamente por tan brillante artículo. Particularmente resulta más acorde con mi gusto la sastrería inglesa, que me parece más elegante, pero he de reconocer que la italiana tiene más estilo y es más creativa, lo que permite lograr, desde mi punto de vista, el equilibrio perfecto en la elegancia masculina: estilo ranciamente clásico pero con unos ingredientes de atrevimiento en determinados detalles, que no siempre resulta fácil de conseguir.
    Un abrazo y feliz Navidad.

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  5. Tengo un sastre que la verdad es que me hace unos trajes fantásticos me ha hecho muchísimos trajes y chaquetas.Es el sastre de una sastrería de prestigio en Madrid y estoy muy contento,pero el estilo es muy inglés ,que a mi me encanta,pero tng alguna chaqueta hecha a mano de cesare attolini sin ser a medida y la verdad que sientan muy bien,y son muy cómodas dando un toque especial.
    He preguntado a mi sastre para hacer mis chaquetas al estilo napolitano con el hombro estilo camisa pero su concepto es demasiado inglés .¿Donde puedo hacerme chaquetas a medida de estilo napolitano como Attolini
    en Madrid?. Gracias

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  6. Me gusta más el estilo inglés,aunque es cierto que los napolitanos aportan cosas nuevas con estilo y cierto desenfado.
    En la sastrería Española, creo que hay mucho talento y tradición,predominando el estilo inglés,pero espero que las nuevas generaciones de sastres sepan o aprendan de la sastrería Italiana,que también aporta cosas diferentes, sobre todo viene muy bien para los que vivimos en el sur dada la comodidad de sus prendas.
    Estoy seguro que si nos pusiéramos, el producto español podría superar o igualar al Italiano.

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  7. Saludos a "El Aristócrata" y a todos los participates.
    Es la primera vez que escribo en el foro, aunque sigo el blog desde hace tiempo y ya le he pedido a los Reyes el "Manual…" y lo primero que quiero decir es: ¡Fantástico artículo y fantástico blog!

    Ya en el tema: el corte napolitano me fascina, me parece más moderno y natural, sin desdeñar el corte más clásico, más inglés, que para nada me disgusta.

    El caso es que desde hace tiempo y en espcial tras este artículo, tengo claro que deseo hacerme con algún traje, o al menos alguna chaqueta, de este corte italiano y ahí viene mi pregunta: no dudo de que, explicando lo que se busca, cualquier buen sastre español será capaz de cosérnoslo, sin embargo, ¿hay alguno "especializado" en este corte, o que tenga más práctica o conociento en él?

    Un saludo a todos y gracias.

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  8. Que tal Aristócrata? muy bueno el artículo me ha sorprendido gratamente sus conocimientos sobre todo lo que respecta a la parte donde explica la construcción de las chaquetas napolitanas al igual que todo lo relacionado con sus origen y las distintas escuelas existentes.

    Con respecto a las fotografías sabe que yo encantado de poderle haber servido de ayuda.

    Por cierto a raíz de varias entrevistas suyas le preguntaban "¿que es para usted alguien elegante?" bueno he escrito un mini artículo donde doy mi visión más o menos de dicho concepto, pero como siempre me gustaría saber su parecer.

    Bueno, lo dicho, gran artículo.

    Un abrazo,
    F.Blázquez (B.F)

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  9. Estimado Aristócrata,
    ¿Podría indicarme la marca de la última chaqueta que aparece en el post? Es exactamente el estilo RTW que estaba buscando.
    Le quedo agradecido de antemano.
    Un placer leerle, tanto en su blog como su libro.
    Un cordial saludo.

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  10. Impecable blog, muy interesante y entretenido, espero que haga su función , quizás , la mas difícil en el contexto español, confundir a un hombre elegante , bien vestido y con estilo con ser afeminado, con todo mi respeto hacia todo el mundo.
    saludos!

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  11. Hola a todos,

    Yo reconozco que siempre he sido más inglés a la hora de vestir pero desde que he conocido más en profundidad el corte napolitano y los resultados debo reconocer que es de lo más interesante.

    Sinceramente creo que depende de nuestra forma de ser y de vestir el que nos guste más un estilo u otro. Pienso que si preferimos el corte inglés es porque es el que más conocemos. Sin embargo, si tuviéramos la ocasión de convivir y conocer más en profundidad el corte napolitano las opiniones al menos se igualarían en número para un lado y otro.

    No sé de quien es la última foto. Quizás Fernando lo sepa.

    Bosoos, no puedo ver la chaqueta en el link q mandas.

    Todos sabemos que se puede ser elegante y estiloso y no por ello dejar de disfrutar de un porte varonil.
    Un abrazo y gracias por vuestros comentarios.

    EA

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  12. Dear Aristocrata,

    Thank you for publishing these articles, coming from a country like South Africa where fasion is very casual at best, I find it really interesting to read about the fashion, particularly the classic fashion that you write about. I have found the information on selecting a taylor and what to discuss with him regarding your requirements.

    I look forward to the next publicaion.

    Kind Regards
    Richard
    South Africa

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  13. Saludos a todos. Hoy, al felicitar las fiestas a mi sastre y amigo Don Fernando Hervás, me ha comunicado haberse jubilado. Cae con él una dinastía de sastres de altísimo nivel. Ya su padre vistió al General Primo de Rivera. En cuanto a él, su discreción le impedía dejar caer nombres, pero el retrato firmado del Rey en las sombras del taller no dejaba de ser significativo. Está pasando ahora mismo los patrones de sus clientes a otro de los grandes, Córdova en Velázquez 96. Su hijo rehusa continuar en el oficio así que imagino ser esta una especie de necrológica- solo profesional, claro está. Desde mi más sentido aprecio digo adiós al amigo y al sastre que conocí todavía en la Plaza de Santa Ana, en una de esas sastrerías de caoba y espejos como las de Savile Row. Le deseo muchos años de larga y fructuosa jubilación, merecida pero siempre dolorosa. Hasta siempre Fernando.

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  14. Hola a todos,

    Fantástico artículo, solo decir que yo también prefiero el estilo inglés, me gustan las costuras de las mangas realzadas por el "chorizo" y la hombrera. Aunque consumo telas lijeras, trajes super entallados y termofijados pq se arrugan mucho menos, eso sí a medida por supuesto.

    FELÍZ NAVIDAD.

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  15. Buenas tardes:

    Tengo una duda que agradecería me pudiera contestar.

    Soy un joven 28 años, y me gusta vestir estiloso (aunque algo moderno) dada mi edad.

    No obstante, no hay duda que lo más elegante en el trabajo es lo clásico y por eso me gustaría me indicaras si te parece correcto vestir en la oficina de traje de 2 piezas y botas Balmoral o éstas se consideran demasiado "formales" para un traje de dos piezas con americana de dos botones.

    Sé que Barcelona no es la ciudad más fría del mundo pero me encanta esa combinación en invierno.

    Es para salir un poco del Oxford (tengo varios en negro y marrón, lisos y semibrogues -e incluso algún full brogue-) y del zapato de hebilla (que no uso tanto como querría pero no lo acabo de llevar tan "a gusto" con el traje).

    Y una última cuestión respecto de las balmoral… ¿sólo pueden ser tipo bota de caña alta o también pueden ser tipo botín -altura dessert boot o similares-?

    Muchas gracias y, me olvidaba, excelente blog!

    Carles

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  16. Excelente descripción de la sastrería napolitana. Yo particularmente me defino mas inclinado al "British Style", pero he de reconocer que tengo una chaqueta informal de atrevido color y extraordinaria ligereza, que me cortó un sastre italiano, y me parece insuperable. Cada momento tiene su ropa y cada situación su estilo, sin que sean excluyentes los estilos clásico inglés y el más atrevido y estiloso italiano. El estilo inglés me gusta más para trajes y el italiano para chaquetas menos formales.

    Saludos cordiales

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  17. Estoy de acuerdo con el último comentario. El estilo español para un traje "de negocios" es inmejorable: Reúne el clasicismo inglés y se acerca a la comodidad italiana. Sin embargo nuestros sastres pecan de excesivo formales cuando hacen chaquetas. Quizá porque en España se vista tan mal de sport y no se pidan en exceso chaquetas, nuestros sastres no saben hacer chaquetas desestructuradas.
    Por favor, si alguien conoce algún sastre en Madrid, que pueda hacer una chaqueta estilo napolitano que haga el favor de comentarlo en este blog.

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  18. art.mora
    Estimado Aristócrata:
    He pedido a sus Majestades Los Reyes Magos su libro, ¿ Hay alguna posibilidad de que me lo dedique de forma personal?:
    El tema de este articulo es, como todos, muy interesante y documentado. Me gustaría someter una cuestión a debate: Se establece como premisa cierta que, el corte italiano es para chaquetas mas informales y, a continuación se cita como ejemplo de elegancia clásica la muy inglesa chaqueta de tweed, la citada prenda es solo apropiada para un estiloso sport y normalmente para fines de semana.
    Atentamente,
    Francisco

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  19. Estimados todos los que participáis en este blog:
    Quiero felicitaros a todos en estas fechas de marcado carácter familiar y cristiano.
    Felicitar al “Aristócrata”, por el esfuerzo que realiza por este trabajo del que nos beneficiamos todos.
    Galiacho nos pone al día de todos los avances que se dan en el mundo de la sastrería del que soy un enamorado por dos motivos.
    Los sujetos de este esfuerzo, los sastres, han hecho un sacrificio inconmensurable guardando y resistiendo la tradición, heredada de sus mayores y, estos, de los antiguos maestros del buen hacer ante la ola de mal gusto que, sobre todo, desde finales de los sesenta, nos ha invadido.
    Vestir decorosamente iba en contra de la ideología imperante de forma casi totalitaria y en contra de lo que son las buenas maneras y educación.
    El esfuerzo de los que no han desfallecido encargando sus ropas a un artesano para conservar su forma de pensar que se trasluce en su forma de vestir, desde los zapatos hasta la última prenda.
    Ellos, los sastres, no se han visto desilusionados y han seguido trabajando con grandes dificultades. Yo, que no soy sastre, os digo que en mi tierra, Granada, no se si ha quedado alguno, lamentablemente.
    Feliz Navidad

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  20. Una vez más felicito a El Aristócrata por su magnífica publicación, muy lograda e ilustrativa.

    En mi caso soy un ferviente partidario del estilo napolitano, tanto para chaquetas de sport, de modo indudable, como para traje ya que su ligereza, comodidad y estilismo son, en mi opinión, muy superiores al estilo inglés, el cual veo como oxidado y anquilosado, sin evolucionar.

    Comparto del mismo modo la crítica, o tal vez fuera mejor decir opinión, de que los sastres españoles siguen unos cánones o patrones muy rígidos, por lo que a mí también me interesa saber qué sastre puede trabajar bien aquí en un estilo próximo al napolitano.

    Y para ir acabando la firma Sartoria Partenopea sobre la que se habla en anteriores comentarios se puede encontrar en Pedro Muñoz en Madrid. Esta primavera pobré una de sus chaquetas, en un precioso dibujo de cuadro vichy azul y poco faltó para que la comprara, pero me coincidió un poco mal para meterme en esos gastos "extraordinarios".

    Aprovecho, igualmente, para desearos unas Felices Fiestas y un próspero y venturoso 2012.

    Saludos,
    J.M.

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  21. Estimado Aristocrata:

    Desde el otro lado del mundo, Perú, cordiales saludos por Navidad y le deseo un excelente año 2012.
    el artículo, como todos los que le he leido, me parece ilustrativo e impecable.
    Ahora bien, quisiera formularle un pedido. En el hemisferio Sur estamos empezando el verano y quisiera que usted pudiera escribir algunas notas sobre el buen vestir en dicha estación del año.
    Saludos

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  22. Tanto por las descripciones del post actual como otras de posts anteriores y las del libro, me inclino más por la sastrería inglesa.

    Aprovecho estas líneas para desear a EA y "sus blogeros"

    Mis mejores deseos (salud principalmente) para el 2012.
    Saludos cordiales.

    PL.

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  23. He encontrado su blog por casualidad y me ha impresionado este artículo, aunque soy mujer ( o precisamente por eso), me interesa mucho la moda masculina, creo que no hay nada tan gratificante y que diga tanto de una persona como el ir correctamente vestida.
    Felicidades.

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  24. Me encanta la elegancia del vestir en un señor y su saber estar, esos pqueños detalles que hacen inolvidable su paso en nuestras vidas.EL ARREGLO PERSONAL ES UN REGALO PARA LOS QUE NOS RODEAN. UN SINCERO ABRAZO.

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  25. ¿"Desenfadamiento"? ¿No séra más bien: desenfado? Y el porqué (de Nápoles y Londres) se escribe junto, no separado (caso de la locución adverbial con sentido interrogativo). Discúlpenme los lectores de este blog y su autor, pero soy tan perfeccionista a la hora de enjuiciar un traje como de hablar o escribir. Y ningún caballero que se precie debería desconocer su lengua materna o hacer mal uso de ella. Soy lector asiduo de este blog. Lamenté su interrupción y me alegré de su regreso; sus consejos me han sido útiles, me ha permitido adquirir conocimientos en algunos casos y, en otros, profundizar en aquello que ya sabía. Incluso me ha hecho sentir parte de una comunidad de fieles amantes de la sastrería y del buen hacer en general. No siempre comparto las opiniones, tanto del autor como de los lectores, pero la comunión absoluta de pareceres sólo se da en el seno de las sectas y discrepar, dentro de un orden y en el respeto a la persona y a las formas, es lo propio de caballeros. Por lo mismo, no puedo dejar de señalar las constantes "patadas al diccionario" que salpican las entradas de este, por lo demás interesantísmo, blog. De igual modo que una grave e incontrolable laxitud se ha terminado adueñando de nuestras sociedades, empeñadas en asociar todo lo formal a lo caduco y enfangadas en una reivindicación patética de lo adolescente perenne, relegando al olvido las siempre necesarias normas de cortesía, el respeto por uno mismo y por los demás o el buen vestir, el uso de la lengua se ha visto afectado e infectado por la misma tendencia destructora, con la débil y ridícula excusa de las prisas. La lengua española (y digo bien española, en la medida en que ésta es un compendio de las aportaciones de las distintas lenguas que se hablan en nuestro país y no es asimilable únicamente al castellano), es de una riqueza ejemplar, producto de una larga evolución. Su desconocimiento por causa de "modernitis" o de "militancia en progresía" es un hecho lamentable, por lo que ningún caballero digno de ese nombre debería incurrir en semejante error. Así como el traje viste nuestro cuerpo y lo presenta al mundo, nuestra forma de expresarnos habla de nosotros. Ambos, el vestir y la correcta expresión, constituyen las dos caras de una misma y personal tarjeta de visita. Tan esencial como un bien escogido par de zapatos es el verbo que empleamos en su correcta acepción; y qué decir de los adjetivos, cuya profusión y variedad representan un acervo pródigo en imaginación y exactitud. Por todo ello, les invito a incluir, entre sus prioridades para este año que empieza, el perfeccionamiento en el conocimiento y empleo de la lengua, como una manera de adentrarse en ese camino de perfección que uno anhela cuando aprende a reconocer un buen corte, a distinguir el estilo inglés del napolitano, a combinar cuadros y rayas, a escoger corbatas o relojes. Redescubran el placer de hojear los mejores diccionarios; paladeen un verbo, un adverbio, un conector o un adjetivo como un vino añejo; huyan de florituras y de redundancias en pos del rigor y la exactitud, igual que harían a la hora de escoger una tela. Den testimonio de su real condición de caballeros, de su compromiso para con lo legado por nuestros mayores, de su resistencia frente a la dejadez y la entrega a los falsos dioses y a las hordas del "qué más da". Sin duda habrá quien los acuse de pedantes, pero ese no es sino el clásico argumento al que recurren mediocres, ignorantes y resentidos, incapaces de reconocer la valía y el esfuerzo. Serán, después de todo, los mismos que los tildarán de engreídos o prepotentes, clasistas o fachas, por el mero hecho de "prendre soin", como dicen los franceses, de su aspecto y su presencia. Sólo me queda, antes de despedirme, solicitar de ustedes su indulgencia respecto de mi actitud "misionera" en defensa de nuestra vapuleada lengua, y si alguno de los lectores ha podido sentirse ofendido por mis palabras, ruego me disculpe

    Un saludo y feliz año.

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  26. ¿ Sabeis cuando un señor demuestra que es Señor ? No con la elegancia de su vestir, no con la pulcritud de sus ademanes ,no con su palabra bella y de perfecta sintaxis.

    Lo demuestra con los hechos, con el ejemplo, con el testimonio de su vida. Entregando su vida por una Causa, revelando a un tiempo que es un Señor para entregarla y que es muy noble y Alta la Causa a la que sirve.

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  27. Aunque se que aquí se habla de sastrería y que la diferencia es abismal necesito adquirir un traje de confección con un presupuesto máximo de unos 650-700 euros, si es menos mejor.

    Como estamos en época de rebajas y en unos días iré a Madrid me gustaría que alguien me aconsejara sobre dónde mirar. He de decir que conozco los trajes de Man, pero no me gustan ni por su corte ni me parece que el precio esté muy justificado. ¿Qué tal los timbrados como Yusty en la tienda del mismo nombre? ¿Alguna recomendación?
    Gracias,
    J.M.

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  28. J.M., a mí personalmente me parece que Lander Urquijo tiene una relación calidad-precio muy buena. Ahora con las rebajas un traje de confección sale por poco más de 300 euros. Eso sí, te tiene que gustar el tipo de corte (a mí me encanta).

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  29. Muchas gracias por tu respuesta Trapo.

    Te agradecería que ya que me lo comentas me indicaras, si es posible, qué tipo de corte es el que se puede encontrar en un traje de confección de Lander Urquijo.

    Un cordial saludo,
    J.M.

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  30. Gracias nuevamente Trapo.

    Ese estilo en traje no me suele convencer.

    Finalmente, si bien casi en límite de lo que quería gastar, me hice con un preciso traje de Canali que se ajustaba a mi cuerpo de maravilla. Lo conseguí con un 30% de descuento sobre su pvp.

    Saludos,
    J.M.

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  31. A Lander Urquijo le quedan unos cuantos años de aprendizaje. Pero si sus precios son baratos…
    Me han hablado bien de un sastre que tiene la sastrería en el mismo edificio que la zapatería Lobb. ¿Alguien sabe algo al respecto? ¿Que tipo de echura y que precios?

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  32. Anónimo, nada tengo que ver con Lander Urquijo, más allá que he comprado un par de veces ahí, pero me sorprende tu comentario. La verdad es que no tengo suficientes conocimientos para saber si le quedan muchos o pocos años de aprendizaje, por eso me gustaría que me dijeras el porqué de tu afirmación.

    Por otro lado, a ese nivel de precios, no conozco nada que me convenza más, por lo que, si tú lo conocieras, te agradecería que me dijeras para ampliar mi ámbito de compras.

    Muchas gracias de antemano

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  33. El sastre que esta en la tienda de John Lobb es Jorge Hidalgo. Muy recomendable. Creo que aprendió de M.A. Framit, que estuvo en esa tienda anteriormente y, por lo que se, ahora trabaja en su casa. En algún sitio he oído que hizo el chaqué del nuevo Duque de Alba. El precio, en consonancia con los zapatos que venden. Si estas pensando en hacerte un traje de primera, sin duda seria una de mis opciones preferidas. Un sastre joven de primer nivel es una rara avis…

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  34. Lander Urquijo estaba estudiando sastrería el año pasado.
    No me interpretes mal: Me parece que tiene un gran mérito poner un negocio de este tipo y más con la que está cayendo.
    He visitado su web y no me convence su estilo. De todas formas, dada su juventud seguro que evoluciona.

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  35. Hola a todos,

    Permitirme romper una lanza a favor de Lander. Gracias a gente como él los que todavía no llegamos a los 40 podremos seguir disfrutando de la sastrería a medida conforme pasen los años. Además efectivamente hay que estar un poco loco o ser un verdadero enamorado de la sastrería para en estos tiempos apostar por una profesión así.

    Indudablemente nadie nace enseñado y en esta profesión solo los años y la práctica te ayuda a depurar la técnica. Sin embargo, es también precisamente la juventud de los sastres más jóvenes la que hace que podamos disfrutar de patrones más acordes a nuestro tiempo y a lo que la sociedad cada vez demanda más. Como ejemplo os diré que de los 200 aprendices que tiene Kiton en su taller ni un 10% llega a los 20 años.

    Bueno os dejo una foto de un hombro 100% napolitano que he sacado de un video:

    Hombro Napolitano

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  36. Aunque son estilos muy distintos,a mi me sigue gustando mas la chaqueta con los hombros muy marcados con chorizo,solapas mas bien amplias,y muy entalladas pero ampias por dentro ,sin llegar al ridículo.
    Tipo a las chaquetas de la sastrería Echevarría,como las que lleva Mario Conde.Pero bueno es cuestión de gustos.
    Saludos a todos y ánimo madridistas. en malas épocas es donde mas hay que apoyar al equipo.

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  37. No se como colgar una foto ,pero si tengo tiempo, m pongo y os enseño mis chaquetas con el hombro como a mi me gusta.
    Tengo chaquetas y trajes heredados, de hace mas de 30 años, de tejidos de franela ,tweed… preciosas todavía se mantienen impecables y no pasan de moda. Para mi gusto con una hechura que hoy por hoy no se hace tan bien. Puedo estar equivocado pero creo que antes se cosía mejor que ahora.

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  38. Señor José María, necesitaríamos un lugar donde subir fotos para intercambiar gustos,ideas y sujerencias. Esto de estar dandonos unos a otros ideas mediante texto se queda muy precario. Poder ver lo que describimos con palabras nos permitiría evolucionar mucho nuestros gustos y podria crear un verdadero foro al repecto de la imagen.

    Saludos para todos, caballeros.

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  39. Las chaquetas de Mario Conde son dos tallas mas grandes y a mi humilde juicio dejan mucho que desear. Alguien preguntaba sobre clientes de Attolini, el Maestro con mayusculas. Pues de memoria me sale Medvev, Bill Gates y un humilde servidor.

    Cuando agun (de)sastre madrileño sepa hacer esto, que venga y me lo cuente, mientras tanto de 3ª division con un ego y precios de " champion liiig " que diria uno de sus infames clientes.. Y para muestra un "boton " dos hombros y lo que haga falta.. Si alguien ha cobrado por esa aberracion, deberia dedicarse a otro oficio y lo digo y lo mantengo.

    http://foropolitico.es/wp-content/uploads/2010/12/zapatero-mitin.jpg

    Con sus chaquetas dos, tres o hasta cuatro tallas mas grandes son sus aberrante pan nuestro de cada dia.

    http://www.novinite.com/media/images/2008-08/96046.jpg

    http://neftegaz.ru/images/Neft%20Perey/Medvedev%20visit%20USA.jpg

    Ahora empezaran a copiarlo…

    Un saludo

    Francisco

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  40. Buenas Aristocrata, queria pedirles recomendacion sobre paginas web que comercialicen la ropa que suelen reseñar en sus posts.
    o si no existe, si conocen casas de ropa italiana o inglesa – que esten en la web ya que vivo lejos de europa – donde se puedan comprar buenas chaquetas, panuelos, zapatos tanto de vestir como sport.
    muchas gracias, sebastian.

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  41. Cordial saludo respetados ciber-visitantes.

    En primer lugar debo señalar, que desde hace bastante tiempo me encontraba ancioso y expectante por poder leer este artículo. Ya que por razones de tiempo y demás responsabilidades no había podido leerlo.

    Entrando ya en materia a examinar este utilisimo y completo ensayo sobre la Sastrería Napolitana, considero que este, como lo menciono EA al principio del mismo, nos trasporta inexorablemente al articulo en donde se estudiaron a cabalidad el British Style y el Stile Italiano. Me llamo mucho la atención la mención de EA sobre esa historia de cercanía entre la Sastrería Napolitana y/o Italiana y la Sastrería Inglesa.

    Así mismo, también me llamo la atención la explicación de EA de todos esos detalles que tanto caracterizan a la Sastrería Napolitana, como es el caso del famoso hombro redondo y la ausencia de forro en los trajes por lo cual los bolsillos de este iban
    adheridos a este como parches. Mas por otra parte no comparto la actitud que, como menciono EA, pueden llegar a adoptar algunas personas conocedoras de la alta sastreria, al ver a un caballero vestido con un traje elaborado con el corte Napolitano; ya que por esto lo pueden tomar por una persona descomplicada e informal. Creo que la comodidad, portabilidad y frescura que la Sastrería Napolitana le imprime a sus diseños, no son razón alguna, ni significa que el portador de estos diseños sea de por si una persona des complicada, informal y carente de seriedad. Muy por el contrario considero a la Sastrería Napolitana y mas exactamente al Stile Italiano un tipo de elegancia mucho mas airada, sofisticada y poco cuadricalada. Más por lo anterior no quiero que se interpreten mis palabras en el sentido de que pienso que el Stile Italiano es mejor que el British Style, ya que en ese sentido estoy de acuerdo con EA, debido a que los 2 estilos mas rivales y competidores, son complemento de lo que es hoy en día la moda clásica masculina.

    Recuerden vivir con clase y elegancia, sin importar las circunstancias de la vida.

    CRISTIAN DUۄA$.

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