
Su origen se remonta a 1860, cuando Henry Poole & Co confeccionó una smoking jacket para el Príncipe de Gales (más tarde Eduardo VII) para que lo vistiera en fiestas informales. En primavera de 1886, el Principe invitó a su casa de Sandringham al americano James Potter a cazar. Potter le preguntó que era lo más recomendable vestir para las cenas y el Príncipe de Wales le aconsejó visitar Henry Poole & Co. Cuando Potter regresó a su casa de Nueva York, la chaqueta que se trajo de Londres se popularizó muy rápidamente en el Tuxedo Park Club (sociedad de millonarios con inquietudes comunes en caza y pesca en el área de Tuxedo). Es desde entonces que se denomina tuxedo en Norteamérica a la dinner jacket británica.